La perspectiva hollywoodiense del derecho | Paréntesis Legal

La perspectiva hollywoodiense del derecho

Lic. Sandra Climént Arredondo

El derecho está lleno de historias en ocasiones interesantes y otras muy aburridas, pero sin duda con un toque de la magia de Hollywood estas se transforman para en el mejor de los casos tocar nuestro corazón, o por lo menos brindarnos unas horas de entretenimiento. En lo personal no considero a las películas o series de abogados herramientas de aprendizaje de fondo, no solo por las diferencias entre el derecho estadounidense y el mexicano, sino además porque es innegable que la carga de dramatización se salta todas las reglas procedimentales que marca la ley y que los guionistas no conocen o eligen no reconocer.

Otro problema con la ficción es que provoca en los espectadores enamorarse de los que en la vida real consideraríamos malos, y aversión por aquellos que se conducen con ética porque en la pantalla nos parecen sosos e incompatibles con el entretenimiento que deseamos; ejemplo claro y actual de esto es Saul Goodman que está lejos de ser el abogado modelo, a diferencia de Howard Hamlin que a pesar de sus virtudes en la abogacía nos cae mal (o caía). Esto demuestra la manipulación de la que somos víctimas ante un buen escritor, por ello siempre debemos recordar que se trata de ficción cargada de la dramatización necesaria para que una película o serie atrape a la audiencia.

Aunque sabemos que el derecho se divide en muchísimas ramas no todas resultan atractivas para Hollywood, indiscutiblemente el penal es el rey de las pantallas pues sus historias son más fáciles de exagerar para hacernos derramar una lagrima o dos; le siguen los juicios cargados de sentimentalismo donde las grandes corporaciones sin escrúpulos ponen en riesgo la vida de las personas, porque las ganancias económicas siempre van primero. En mucha menor medida, logran colarse historias sobre el derecho laboral y el fiscal.

Para hacer esta lista repasé mentalmente todas las películas y series que he visto desde que tengo memoria, algunas historias, aunque me gustan, se quedaron fuera como Matar a un ruiseñor porque solo leí el libro y nunca vi la película (1962); o La Firma (1993) que aunque trata sobre las peripecias de un abogado de impuestos rama a la que yo me dedico, la trama no me parece lo suficientemente abogadil para incluirla. No fue sino hasta que empecé a redactar este artículo que me percaté que todas las películas que enlisto son bastante viejas, no sé esto se deba a que en la actualidad ya no hacen buenas películas de abogados y se concentran en las series, o porque es a mí a quien se le acumularon los años.

Además debo recordar que en gustos se rompen géneros, por lo que las películas y series a las que me refiero son mis favoritas, si dejé fuera las tuyas es porque a mí no me gustan o simplemente porque no las he visto. Así la lista es completamente subjetiva y se compone de historias que de alguna forma o en determinado momento se quedaron grabadas en mi mente, ya sea por las injusticias que narran o la calidad de las actuaciones, pero de ningún modo por lo apegadas que se encuentran al derecho.

  1. Una acción civil (1998)

“La responsabilidad más grande que puede tener un abogado es el orgullo,

este ha perdido más casos que pruebas pésimas, testigos idiotas y un juez en la horca,

todo junto. No hay absolutamente ningún lugar en el tribunal para el orgullo.”

Jerome Facher

Jan Schlichtmann (John Travolta) abogado de una pequeña firma especializada en casos de lesiones personales entra en la Corte empujando la silla de ruedas de su cliente parapléjico, limpia amorosamente la saliva que chorrea de su boca ante la mirada acongojada del jurado; él conoce el poder de la manipulación y su contraparte el abogado que defiende al hospital acusado de negligencia también, por lo que este último suplica llegar a un acuerdo y prevenir que ese joven lisiado llegue a testificar en el juicio.

Pero a Jan solo le importa el dinero que puede sacar a costa de sus clientes, la compasión es la fachada que esconde a un abogado egoísta, vanidoso y avaricioso por lo que cuando un compañero de su firma propone un caso sobre un grupo de niños de un pueblo pequeño que han muerto bajo sospecha de que la causa es la contaminación del agua, lo desecha de inmediato por el alto costo que representaría para su pequeña firma y decide acudir personalmente a informales la decisión a los padres; pero cuando abandona Woburn, Massachusetts en su lujoso auto se le ocurre seguir el cauce del agua, donde descubre que los causantes de la contaminación son empresas multimillonarias a las que podrá sacarles una gran tajada. 

El caso Anderson v. Cryovac Inc. es real pero aquí no vemos un espectacular final como en Erin Brockovich (2000), y esta es la razón por lo que es mi película favorita; aquí no hay fama y fortuna para nadie, no retrata el triunfo del pequeño sobre el gigante sino que supuso el colapso de la pequeña firma de abogados que terminó en bancarrota y un arreglo económico que representó apenas un salvavidas para los socios, casi nada para los padres que perdieron a sus hijos y le permitió a la industria seguir contaminando. 

Al final vemos a Jan luchando por reiniciar su carrera en la abogacía y que en un intento por calmar al fantasma que lo persigue, informa a la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos de América sobre la contaminación del agua de Woburn, logrando lo que él no pudo.

Aunque la película no fue éxito en taquilla ni recibió una ovación de la crítica, la historia es muy interesante al mostrarnos a la firma colapsar pues es algo que difícilmente encontramos en las películas sobre abogados; además cuenta con un excelente reparto destacando Robert Duvall (El Juez), quien interpreta al sagaz y hasta malvado abogado representante de una de las demandadas y que le mereció una nominación al Oscar. 

Puedes verla en Amazon Prime Video, Apple TV y Cinepolis Klic.

Rotten Tomatoes: 55%

IMDb: 6.6/10

  1. El abogado del diablo (1997)

“Los abogados son el ministerio del diablo.”

John Milton

¿Harías lo que fuera por fama, dinero y poder? Kevin Lomax (Keanu Reeves) es un joven abogado que jamás ha perdido un caso, con los ojos puestos siempre en el triunfo la película inicia con él destrozando a una adolescente en la Corte para salvar a su cliente acusado de violación de menores; sin embargo a pesar de su talento aún no tiene lo que más desea, hasta que es reclutado por una gran firma de abogados de New York que lo seduce a él y a su bella esposa Mary Ann (Charlize Theron) con un lujoso departamento, la estabilidad económica y el poder con el que siempre soñaron. 

Su jefe John Milton (Al Pacino) se convierte en su mentor mostrándole las delicias del poder, perfecciona los trucos que le permitirán salirse siempre con la suya y le enseña que la moralidad no tiene cabida en la abogacía. Pero el éxito viene con un precio, para Lomax inicia con el derrumbe de su matrimonio provocado por sus largas ausencias y el desmoronamiento de su esposa quien víctima de visiones aterradoras pierde la cabeza y termina encerrada en un manicomio.

Como abogada y amante de las películas de terror ésta es de mis favoritas, y aunque parece estar completamente alejada de la realidad, quizás no sea así porque después de todo el diablo está en todas partes. 

Puedes verla en Amazon Prime Video, Apple TV, HBO Max, YouTube y Google Play 

Rotten Tomatoes: 79%

IMDb: 7.5% 

  1. Filadelfia (1993)

“En la Corte la justicia es ciega y no distingue raza, credo, color

 u orientación sexual; pero no vivimos en la Corte ¿o sí?”

Joe Miller

El derecho laboral se coló en Hollywood con la historia de Andy Beckett (Tom Hanks), un brillante abogado que fue cazado por una firma de alto perfil de Filadelfia desesperada por unirlo a su equipo; sin embargo desconocían que era homosexual, y para colmo durante su trabajo contrajo VIH. Cuando sus jefes descubren su condición por una lesión característica de la enfermedad en su cara, arman un complot en su contra escondiendo una demanda para acusarlo de incompetencia creando así una razón fundada para despedirlo.

Andy busca desesperadamente que se haga justicia, evidenciar la discriminación de la que fue víctima pero en una época donde su condición era un estigma, nadie estaba dispuesto a representarlo; ni siquiera el abogado Joseph Miller (Denzel Washington) quien se muestra incomodo ante la presencia de un homosexual, aterrado por el sida y rechaza el caso justificándose bajo el argumento de que es imposible enfrentarse a una gran firma. 

Un día por casualidad se reencuentra con Andy quien estudia para preparar su defensa, conmovido finalmente decide representarlo iniciando el desarrollo del juicio que es la base toral de esta gran película. Aunque la temática se sienta alejada del mundo actual donde la sociedad es más abierta y acepta la homosexualidad (pero no al cien por ciento), en su época esta película presentó la discriminación y la lucha por dejar de lado los estigmas.  

Puedes verla en Amazon Prime Video, YouTube y Apple TV.

Rotten Tomatoes: 89% 

IMDb: 7.7/10 

  1. Cuestión de honor (1992)

“Este es un argumento de venta. No lo va a ganar la ley,

lo van a ganar los abogados”

Teniente Daniel Kaffee

En la Base Naval de la Bahía de Guantánamo los marinos vigilan muros y cumplen órdenes de lo contrario la gente muere, o al menos ese es su lema. La película trata la muerte del soldado Santiago después de recibir una golpiza, y del juicio de dos marinos que son culpados del asesinato; la defensa de estos queda a cargo del Teniente Daniel Kaffee (Tom Cruise), abogado inexperto y que prefiere acordar antes que llegar a juicio, y de la Teniente Comandante Galloway (Demi Moore) que convence a este último que la tragedia se relaciona con un código rojo, regla no escrita en la marina donde los superiores ordenan disciplinar a los elementos que no cumplen con las altas expectativas de fuerza y obediencia.

Esta película es un clásico y retrata de forma sublime el sueño guajiro de cualquier abogado, presionar al testigo para que termine confesando su culpabilidad mientras declara, y aunque esta hazaña es rarísima en la vida real en la ficción es un recurso usado comúnmente; sin embargo representa el punto más alto de esta película, no porque considere la posibilidad de que esto suceda, sino por la calidad y el peso de los actores que participan en esta escena.

Puedes verla en Amazon Prime Video, Apple Tv, Google Play y YouTube.

Rotten Tomatoes: 89%

IMDb: 7.7/10

  1. Chicago (2002)

“Deslúmbralos y nunca descubrirán la verdad”

Billy Flynn

Los juicios no habían tenido un soundtrack hasta que llegó Chicago. Corría el año 1924 y Roxie Hart (Renee Zellweger) sueña con ser famosa y está dispuesta a todo para lograrlo, así consigue un amante que le promete todo lo que ella desea con tal de meterse en su cama; cuando Roxie descubre la farsa en un ataque de furia lo mata a balazos, termina en la cárcel donde espera el juicio que de declararla culpable la llevará a la horca. 

Pero no todo está perdido, convence a su inocente marido de pagar el mejor abogado de la ciudad para salvarla. Así aparece en escena Billy Flynn (Richard Gere), quien le enseña a Roxie que para lograr la libertad la verdad es lo que menos importa, como un titiritero profesional mueve los hilos que controlan no solo a su cliente, sino también al juez, a la opinión pública pero sobre todo al jurado. En Chicago la estrategia no se basa solo en números musicales, también hay embarazos falsos, un retoque al pasado de la inculpada y la clásica justificación de defensa propia. 

Aunque no soy fan de los musicales este cumplió con el objetivo del abogado y me deslumbró, y aunque ambientada hace casi cien años sin duda el encantamiento como estrategia de defensa sigue vigente no solo en las películas y series de abogados sino también en una que otra Corte real.

Puedes verla en HBO, Amazon Prime Video, Apple Tv y YouTube.

Rotten Tomatoes: 83%

IMDb: 7.2/10 

Limitarme a cinco películas no fue una tarea fácil pero debo respetar la extensión, así también para un rato de entretenimiento recomiendo La firma (1993), La voz de la igualdad (2018), Erin Brockovich (2000), Kramer vs Kramer (1979), Tiempo para matar (1996), Michael Clayton (2007), Legalmente rubia (2001), Mentiroso, mentiroso (1997) y El exorcismo de Emily Rose (Netflix, 2005).

La actualidad es más indulgente con las series sobre abogados, o quizás solo es que ahora están más a nuestro alcance pero a diferencia de las películas estas son más recientes.

  1. The good wife (2009-2016)

“He defendido a suficientes personas para saber cuan superficiales son las palabras.

No me importa que creas, me importa lo que puedes probar”

Alicia Florrick

La serie gira en torno de Alicia Florrick (Juliana Margulies), una abogada que tiene más de una década sin ejercer el derecho pues se concentró de lleno en su papel de esposa y madre hasta que su esposo, entonces Fiscal de Distrito, se ve envuelto en un escándalo sexual y termina en prisión; Alicia se ve forzada a regresar al mundo laboral para mantener a sus hijos adolescentes, y termina trabajando en la firma de un antiguo compañero de la universidad donde destaca a pesar de su edad e inexperiencia.

En lo personal es una de las series de abogados que más he disfrutado, principalmente porque en cada capítulo los abogados pasan mucho tiempo en la Corte y además porque la trama aunque centrada en Alicia desenvuelve un sin número de personajes que no solo le dan fluidez a la trama, sino que la vuelven más entretenida; como Diane Lockhart su jefa y socia de nombre de la firma o Kalinda, la reservada y perspicaz investigadora privada y mejor amiga de Alicia. 

Además está llena de personajes secundarios con personalidades tan chispeantes y divertidas que no sabes si odiar o amar, pero que definitivamente agradeces cuando reaparecen. Estos van desde los abogados rivales de Alicia que para ganar echan mano de todos los trucos sucios que conocen, como Louis Canning interpretado por Michael J. Fox quien se vale de su discapacidad para manipular a la corte, o Patty una abogada embarazada que se aprovecha descaradamente de su estado y después de su bebé para ganar tiempo y simpatías. Incluso llegas a identificar a los jueces y las manías que los caracterizan; o a los clientes recurrentes como el descarado millonario Colin Sweeney, que fue acusado de matar a su primera esposa y casi matar a la segunda. 

Con siete temporadas y 155 episodios es una serie que vale la pena ver, pues va más allá de una mujer engañada que supera la adversidad y nos ofrece una visión muy divertida del derecho.

Puedes verla en Paramount 

Rotten Tomatoes: 91% 

IMDb: 8.4/10

  1. The good fight (2017-2022)

“Todos merecen una defensa, simplemente no todos merecen mi defensa”

Diane Lockhart

Spin-off de la anterior esta se centra en la nueva vida de la abogada Diane Lockhart (Christine Baranski), quien después de renunciar a su trabajo en una importante firma para disfrutar de su jubilación ve su sueño truncado cuando pierde todo su dinero y reputación por el escándalo financiero causado por uno de sus amigos cercanos, así termina trabajando en una firma de abogados afroamericanos que se especializan en brutalidad policiaca.

Manteniendo la esencia de la primera, ofrece también mucho tiempo en la corte y personajes secundarios con chispeantes personalidades que simplemente te atrapan; aunque en momentos la serie pierde el ritmo por la obsesión de la protagonista con el presidente Trump, me agrada la forma en que aborda el tema racial e incluso la cultura woke, llegando al absurdo de mostrar en su última temporada la creación de una “Corte” (por supuesto sin jurisdicción) por un anciano inestable que juzga ignorando pruebas y se basa en un sistema de puntos que aplica a capricho, una clara analogía a la “justicia” que se aplica en las redes sociales. 

Puedes verla en Amazon Prime Video y Paramount. 

Rotten Tomatoes: 70% 

IMDb: 8.3/10

  1. Better call Saul

“¿Sabes por qué Dios hizo a las serpientes antes que a los abogados?

Necesitaba práctica”

Saul Goodman

Conocimos a Saul Goodman (Bob Odenkirk) en el octavo episodio de la segunda temporada de Breaking Bad, presentado como un abogado corrupto y el hombre correcto para defender los negocios de Walter White y Jesse Pinkman, el personaje se volvió recurrente en esa historia y fue imposible no caer bajo el hechizo del escurridizo abogado. Este spin-off nació con el difícil reto de ser tan buena como la anterior, situación que sin duda logró. 

Magistralmente escrita y con tomas increíbles se centró en el pasado del personaje, nos presenta a un Jimmy McGill quien vive a la sombra de su hermano, todo el sufrimiento y lucha para ganarse su respeto cosa que nunca sucede; pero sí logra capturar a la audiencia, enamorarnos aún más del personaje y descubrir la génesis de Saul Goodman; aquí se pierden los deseos de trabajar en una gran firma, usar trajes sobrios y manejar un Mercedes Benz, y aunque en lo personal no apoyo los atajos y trucos sucios, resultan muy atractivos y divertidos para la televisión.

Es una buena serie en todos los sentidos, ese andar lento no es más que la preparación de giros increíbles, la única razón por la que no está en el número uno de mi lista es simple, tiende a alejarse del derecho a diferencia de las dos primeras y se centra demasiado en el cartel. 

Puedes verla en Netflix 

Rotten Tomatoes: 96% 

IMDb: 8.8/10

  1. American Crime Story: el pueblo contra O.J. Simpson

“Mira, tal como son las cosas a veces, el dinero es la única forma de obtener justicia”

Johnnie Cochran

Esta historia no necesita presentación, viejos y jóvenes conocemos al menos superficialmente la acusación y el juicio contra el jugador de fútbol americano O.J. Simpson (Cuba Gooding Jr.) por el asesinato de su exesposa y su amigo íntimo. Aunque soy fanática de las historias de American Horror Story era reticente de ver esta serie, después de todo se aleja de la temática terrorífica que me gusta y se centra en un juicio por el que no sentía interés. Sin embargo después de escuchar buenas críticas me decidí a verla, encontré un excelente retrato del derecho y como este se manipula no solo en la ficción sino también en la vida real.

¿O.J. mató a su exesposa? Creo que eso nunca lo sabremos. La serie narra la historia desde el descubrimiento de los cadáveres, la huida en la Ford Bronco y el juicio donde su equipo legal de ensueño formado por Robert Shapiro (John Travolta), Johnie Cochran (Courtney B. Vance), F. Lee Bailey (Nathan Lane) y Robert Kardashian (David Schwimmer) montan la defensa perfecta, el racismo.

El final lo conocemos todos, al jurado le tomó solo cuatro horas llegar a un veredicto de no culpable; sin embargo es interesante porque muestra como la fiscalía cae de a poco víctima de su vanidad, y que el peso de la discriminación racial tan presente en los Estados Unidos de América hace tambalear la justicia un juicio a la vez.

Rotten Tomatoes: 94% 

IMDb: 8.4/10

  1. How to get away with murder

 “¿En caso de duda? Cierra la boca”

Annalise Keating

Annalise Keating (Viola Davis) es todo un personaje, efectiva abogada defensora y profesora de derecho criminal clase a la que le gusta llamar how to get away with murder (como salir impune de una acusación de asesinato); aunque no seas penalista es imposible no emocionarse con sus estrategias de defensa, con esa forma fluida y sagaz con la que conduce su clase y provoca deseos de más catedráticos como ella en las Facultades de Derecho mexicanas. 

Pero Annalise arrastra muchos secretos, su temple fuerte y seguridad son una fachada para esconder su alcoholismo y los traumas emocionales que carga desde la infancia. La serie empieza con fuerza y se mantiene en mi lista por el entretenimiento que brindan sus clases, y por las experiencias que deja en los discípulos escogidos para trabajar en su firma; sin embargo, como la mayoría de las historias pierde el ritmo cuando el derecho se deja de lado y se ve superado por las historias personales de cada uno de los personajes, las cuales en mi opinión no son lo suficientemente interesantes.

Puedes verla en Netflix 

Rotten Tomatoes: 86% 

IMDb: 8.1/10 

Otras series recomendables sobre juicios y derecho son la nueva versión de Perry Mason, que aunque tiene un inicio confuso para quienes ya conocíamos sus historias el final devela la razón por la que me refiero a ella (HBO); también disfruté La escalera de HBO, versión adaptada del documental de Netflix y Goliat que hace honor a su nombre y cuenta la historia de un abogado pequeño venciendo al grande (Amazon Prime Video). En menor medida Your honor (Paramount), Defending Jacob (Apple TV) y El abogado del Lincoln (Netflix) y La ley y el orden (Amazon Prime Video). 

Cierro el artículo reiterando que jamás hay que olvidar que estas historias son ficticias, y aunque algunas pueden estar basadas en hechos reales no escapan del todo a las exageraciones necesarias para hacerlas más interesantes; y aunque la vida real supera en muchos aspectos la ficción (basta ver las noticias), es necesario dejar de idolatrar o desear ser como alguno de los personajes de tus películas o series favoritas. 

El entorno en el que vives ya sea grande o pequeño es el real, nuestra obligación es trabajar para superarnos, ser la mejor versión de nosotros mismos dejando de lado el drama concentrándonos en el estudio constante del derecho y adoptando la ética profesional que debe regirnos en todos los sentidos.