Auditoría forense en la industria de la construcción.
C.P. y L.D. María de Lourdes Pinzón Escalante.
Situación actual mexicana
En general, la industria de la construcción es un indicador de crecimiento económico, puesto que genera 7.8% de participación en el PIB nacional (dato 1T INEGI 2019)[1], por lo que es de preocupación la decaída que se ha visto en el último año, siendo la segunda peor caída desde 2009, lo cual es de alto impacto para la economía nacional, puesto que es generadora de un factor económico muy importante: empleo.
Siendo de esta rama industrial la más afectada la subrama llamada Edificación, la cual trata sobre construcción de vivienda unifamiliar o multifamiliar, edificaciones comerciales, de servicios, escuelas, hospitales, y otros auxiliares de los mismos; teniendo una participación del 48% sobre el porcentaje de la rama de construcción del PIB, es decir, es un aproximado del 4% del total del PIB de México en 2019.
Ambiente de riesgo
Al tener los datos de porcentaje de participación del PIB se puede dar al lector la idea de que cualquier efecto negativo sobre esta industria afecta a la economía nacional, dado que se considera de alta fluctuación de recursos económicos y financieros, así como alto flujo de dinero, por ende, al tener estas condiciones, también es vulnerable de ciertas responsabilidades y riesgos, como lo son: responsabilidades civiles y penales en caso de incumplimientos o daños a terceros, así como susceptible de delitos fiscales, financieros; teniendo de los más graves la CORRUPCIÓN (como herramienta de crecimiento de constructoras) y LAVADO DE DINERO, los cuales repercuten a la economía mexicana gravemente.
Medicina y vacuna: AUDITORÍA FORENSE
La auditoría forense primeramente identifica como agentes de riesgo en la construcción de Obra pública y privada los siguientes:
Riesgos inherentes: el cambio gubernamental actual, puesto que se han aplicado “medidas anticorrupción” (bloqueos a recursos públicos por malos manejos de servidores públicos en permisos y licencias), leyes nuevas y cambios legales de revelación de información; la no aplicación de recursos públicos a infraestructura pública. Esto afecta a aquellas constructoras que tienen un riesgo muy grave, que es tener un solo cliente gobierno y obra pública.
Riesgos internos: El “fraude ocupacional”, en el que los involucrados son trabajadores de las propias constructoras en niveles directivos, administrativos y de gestión operacional, también trabajadores de obra tales como supervisores de obra, superintendentes, directores de proyecto, o aquellos con posible contubernio con proveedores como contratistas, gestores de permisos y licencias, verificadores de obra, proveedores de estudios y certificaciones, entre otros, logrando el fraude mediante una relación estrecha, haciendo cambios en facturas, precios unitarios, valoraciones, falsificaciones, manipulación de evidencias y bitácoras, estimaciones, etc.
Por otra parte cuando intervienen funcionarios públicos, se tienen consecuencias financieras fuertes como lo son gastos extraordinarios (ejemplo, “mordidas a personal de alcaldías, municipios, de áreas de licencias y permisos, etc.) lo cual para compensarlo lo trasladan a un alza al precio de venta final de la obra, ya sea para los consumidores finales (ejemplo, vivienda familiar) o para terceros (ejemplo, rentas en centros comerciales, obras públicas millonarias con vicios ocultos).
Dichos riesgos traen consigo pérdidas millonarias con un efecto exponencial, es decir que aumenta el perjuicio de forma más rápida en el tiempo.
La Auditoría Forense tendrá que llevarse a cabo para que sea efectiva mediante un equipo compuesto por auditor ingeniero-arquitecto, contador público de obras, y en su caso abogado, logrando con ello la INVESTIGACIÓN, DETECCIÓN, CORRECCIÓN y PREVENCIÓN, con efectos positivos a largo y corto plazo.
Para lograr visualizar esta solución hay que entender la definición actualizada de Auditoría Forense como la disciplina que aplica la práctica de revisión física y por tanto de cumplimiento objetivo de las obras de construcción, tomando como pilar la técnica contable-financiera, legal, y de especialidad aplicable (arquitectura, ingeniería), estudiando las causas y efectos, mediante un sistema de análisis de pruebas, evidencias y materialización de hechos para detectar, medir y prevenir probables irregularidades-riesgos que puedan llegar a causar un daño a la empresa y terceros, así como identificar áreas de oportunidad, que crea beneficios (ahorros, mayores ingresos) y mitiga riesgos.
También se entiende como la evaluación de procesos y del control interno existente en los niveles de la administración, operación y gobierno corporativo (directivos y socios) de la empresa para la detección de irregularidades, mediante indicadores y patrones de conducta que ayudan a ver la anormalidad, teniendo como resultado medidas correctivas, de investigación y prevención; siendo soporte para mejora continua.
La auditoría forense tiene que identificar riesgos significativos dentro y fuera de obra, como los relacionados al manejo de recursos materiales y monetarios, tales como control de pagos y de cobros, manejo y uso de materiales y herramientas, que por lo general son los mayor afectación en la construcción, por tanto se recomienda un claro estudio previo de:
- proveedores de servicios: para evitar pagar más allá de lo que se debe y evitar contubernio de proveedores con trabajadores de la constructora.
- clientes de proyectos: desde la diversificación de clientes, no apostar a un solo cliente, así como investigarlo previamente, es decir, si es pagador en tiempo y forma, sin antecedentes de procesos legales ejecutivos mercantiles, sin demandas en su contra por posible fraude e impagos.
Recopilación de evidencia
En la construcción es parte esencial y de perfil del auditor que sepa preguntar qué evidencia solicitar y cómo solicitarla, como sustento de cada operación y avance en la obra, sobre todo aquellas que amparen de manera objetiva los porcentajes de avance y por tanto los pagos y cobros, que sean comparables y verificables, es decir, se recomienda que se respalden por documentos veraces, verificables, además, de la verificación “en físico de la obra” (visitas de revisión) por parte de un tercero independiente de la misma constructora o un equipo de auditoría multidisciplinario que verifique los avances en físico reales y que concuerden con las bitácoras y estimaciones de obra que tienen comunicadas. Teniendo como ejemplo la ecuación siguiente:
Visto bueno de % Estimación de obra (para cobros y pagos) = Evidencia física presencial (visita a obra) + revisión de “no vicios ocultos” + comparación de material usado, comprado y presupuestado (evitar mermas innecesarias y robos de material)
Análisis de la evidencia:
La auditoría forense en general aplica el estudio de la veracidad y objetividad de la evidencia, de forma que pueda ser material, verificable, relevante, medible y comparable, es decir, que ayude a la comprobación de que existió un daño de impacto negativo significativo financiero-económico y legal.
Para realizar el análisis será necesario estudiar el ambiente de control interno, prioritariamente para la industria de la construcción, el referente a las órdenes de pago y cobros diferidos a clientes, identificando a los trabajadores clave que sean riesgo de contubernio con proveedores y clientes para cometer fraudes, robos de material, malos manejos de dinero y herramientas, entre otros.
Resultados
- Se podrá identificar las áreas, conceptos y procesos de mayor riesgo, ejemplo: proceso de elección de contratistas.
- Se hará un mejor ambiente de control evitando costos y tiempos sobrantes (AHORRO), el auditor forense debe tener en cuenta la relación de recursos finitos (tiempo y dinero).
- Se identificará el personal responsable y los puestos de personal de alto riesgo para difuminar el riesgo, (segregación de responsabilidad y funciones, vistos buenos de otros responsables)
- Eliminar o transformar áreas que representen gasto innecesarios y riesgos de fraude, robo y daños en la información (evitar áreas de dobles funciones, robo de contratos, títulos de crédito, datos personales, etc.).
- Menos responsabilidad penal, civil de las empresas constructoras frente a terceros.
- Menos demandas laborales
- Solvencia económica al identificar áreas a reestructurar y en prevención de riesgos legales que son contingencias caras
Puntos importantes a considerar en la Auditoría Forense:
- Evidencia real y constatable
- Responsabilidad sobre los trabajadores, supervisores, gerentes y directores de las constructoras
- Control adecuado, mejora continua y actualización de contratos con clientes, proveedores y trabajadores
- Estudio previo de clientes y proveedores
- Análisis del ambiente de control interno de cobros y pagos
- Equipo de auditoría forense deberá ser ideal por 3 profesionistas: personal técnico (arquitectos, ingenieros), personal administrativo-financiero (contador, financiero) y personal legal (abogados)
- No depender de un solo tipo de cliente, el auditor tiene que ver incluso el riesgo de tendencia del negocio actual
- Confidencialidad y resguardo de información legal y financiera (adecuado manejo y resguardo de contratos, personal, censo de proveedores)
- Revisión a tiempo y reestructura del personal ayuda a conservar empleos, confianza en clientes privados y por ende, crecimiento económico
Por último, cabe destacar que a los empresarios y dueños de constructoras se tienen que sensibilizar en que conviene una inversión en revisiones físicas a las obras por un equipo interdisciplinario, lo cual evita pérdida de dinero y tiempo en contingencias legales, en robos de material, en fraudes de proveedores, entre otros, lo cual evita cierre de empresas y pérdidas de empleos.
La auditoría forense ayuda a difuminar el riesgo legal y financiero que tiene la empresa constructora referente a la responsabilidad penal y civil que conlleva su operación, tanto como sociedad, como por alguno de sus trabajadores, directivos o socios.
[1] https://www.inegi.org.mx/temas/pib/